jueves, 19 de enero de 2012

Que nadie me moleste porque me voy a confesar conmigo misma. El verano tiene algún tipo de problema conmigo, no por el calor que no banco y nunca voy a bancar, va más allá de eso, es algo más profundo. Siento que en Enero, estando de novia y realmente feliz, vuelvo a tener 14 años y a sentirme mal, fea, sin ganas de comer. Me aburro porque no estoy en constante contacto con las personas que me rodean el resto del año. Me aburro porque estás en México y lo único que puedo percibir de vos son un par de letritas en mi monitor. Me quedo sin aire de tanto extrañarte.

Y vuelvo a sonreír cuando me acuerdo que en 5 días voy a volver a verte y para la suerte de los dos en la playa y solos. No quiero que mi estado de ánimo dependa de una persona pero tampoco puedo hacer algo contra eso. Me enamoré y ahora todo mi mundo depende de vos.

1 comentario:

  1. Nadie quiere volverse tan dependiente de alguien, porque corremos el riesgo de que esa persona no esté y nos quedemos en el vacío inerte de no sentir. PEro es parte de entregarse, de amar, de dejar nuestra vida en manos del otro porque así lo quisimos... porque ELEGIMOS que esa persona sea la indicada. Es la mejor prueba de amor que puede existir, y como todo lo lindo en esta vida, tiene sus riesgos. Pero nunca lo suficientemente fuertes como para no afrontarlos :)

    ResponderEliminar